Esta tarde he estado con una amiga dando una vuelta por el centro. Y, puesto que mis vaqueros han decidido pedirse la jubilación, nos hemos pasado por unas cuantas tiendas. Parece verdad eso de que comprarse cosas nuevas sube la moral. Sobre todo si te compras una talla menos de la que llevabas antes. Y mola mucho más, encontrar apaños a buen precio. Vamos, que no me puedo quejar.
Lo primero que fuimos fue entrar a Berska. Los vaqueros de allí me gustan mucho. Hace unos años descubrí que, incluso en la tienda menos sospechada, se pueden encontrar buenas oportunidades. La verdad es que no es mi estilo. Pero me gusta mirar allí los vaqueros. Estos me costaron... no sé, no llegaron a 20 euros. Creo que fueron 19'95
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Una vez en la cola, me di cuenta de que había unas camisetas básicas por unos 3'99€ (vamos, 4€) y me cogí un par. Una blanca (que la andaba buscando) y otra gris. (Que tengo pensado hacerle una cosilla)
Más tarde nos pasamos por Sfera. Y esa bonita camiseta verde y blanca. (Como la bandera de Andalucía) me costó 4€.
La verdad es que son básicos. Pero en mi armario ya no había ni básicos ni bósicos. Esto de ser pobre y no tener tiempo es un rollo patatero... pero esa camiseta mola un montón.
Por último, nos entró el hambre... Así que terminamos en un sitio que hay al final de Gran Vía y del que me habían hablado muy bien. Comida sana, no muy mal de precio y en pleno centro. (Que, además, miss caprichitos, tenía antojo de ensalada con atún) Se llama Revive. Como su nombre indica, después de cenar allí te sientes hasta, incluso, mejor persona. Eso que veis en la foto es un zumo de espinacas y sandía que, aunque suene a caca de la vaca, estaba buenísimo, buenísimo, buenísimo. Y después, haciendo caso a mis caprichos, me pedí una ensalada de Atún. (Riquísima, riquísima, riquísima)
En fin, eso es todo. Ya he presumido de compras y de vida saludable.
¡Buenas noches!
¡Nos vemos!
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